Con este post os quiero dar la bienvenida al blog y al mismo tiempo explicar los motivos que me han hecho escoger una estructura y diseño web minimalista para mi web.
El resultado que veis actualmente dista bastante de mi primer diseño inicial. Al principio pensaba en incluir una página principal llena de imágenes, con numerosos botones de llamada a la acción, anuncios para intentar rentabilizar la web, diferentes menús y sidebars… Todo muy bonito vamos, pero utilidad cero.
¿Entonces que me ha hecho cambiar todo esto?
Los lectores.
Un lector de un blog no es alguien que acuda a tu página en busca de que le llenen el navegador de publicidad, ni suscribirse a tu web para que le mandes más publicidad (por si no le llega con la que ya tienes), ni tampoco hacerse seguidor tuyo en las redes sociales. Es simplemente un usuario que acude en busca de información sobre algo que has escrito o publicado.
Lo simple gana
Cualquier blog debería nacer principalmente con el objetivo de crear y compartir contenido. Y siendo el contenido lo más importante, obviar en mayor medida el resto de distracciones. Perfecta para el que la escribe y perfecta para el que la lee. Sin anuncios ni publicidad por ninguna parte.
Fácil diseño, rapidez y barato
Con una web minimalista te puedes olvidar de pasarte horas o días escribiendo difíciles códigos para el diseño. No necesitas invertir en plantillas premium ni complicarte demasiado.
Por otro lado, al tener archivos poco pesados no te hará ganar rapidez en la carga y no necesitas disponer de un gran plan de almacenamiento en el servidor. El más básico te debería llegar. Con webempresa, que es la que yo uso y una de las mejores valoradas no me cuesta más de 80€ al año con el dominio incluído el primer año.
Menores complicaciones y tiempo dedicado
De lo único que te tienes que preocupar es de crear contenido.
Olvídate de listas de suscriptores, redactar emails semanales, tener usuario en todas las redes sociales, invertir en publicidad en AdWords o Facebook para patrocinar tu web… Si lo que tienes interesa, el resto no tardará en llegar. Hay formas más fáciles y gratuitas de darse a conocer: Escribiendo post de invitado para otras webs, comentar activamente con el nombre de tu web en blogs, el boca a boca de amigos y familiares…
¿De qué puedes y deberías prescindir?
- Anuncios
- Cookies
- Ventanas emergentes
- Botones de suscripción a tu newsletter por todas partes
- Widgets con los últimos comentarios en twitter o cosas por el estilo
- Múltiples páginas por artículo
- Imágenes cada 2 párrafos
- Contenido bloqueado para usuarios que no comparten en las redes el post que visitan.
La lista podría seguir bastante más, esto es un sólo ejemplo de las cosas que podrías obviar.
Y con esto no quiero decir que debas cumplirlo a rajatabla. Si consideras que tener una lista de suscriptores te ayudará en el futuro adelante. Si quieres monetizar el blog con anuncios, igual. Depende de cada uno y sus prioridades, así que analiza y actúa en la manera que mejor te convenga pero no te olvides que tus visitantes son tu fuente de alimentación para todo esto.